Quizá muchos recuerden la polémica que se generó el 2014 cuando Samuel Chambi ganara el IV Salón Nacional de Fotografía del Icpna con una serie de imágenes que procedían de errores fortuitos de un escáner. En ese momento, el carácter no figurativo de las imágenes de Samuel entró en conflicto con una mirada ortodoxa a la fotografía, que exigía que esta retratara “la realidad” y se discutió mucho acerca de si el premio había sido bien adjudicado y, sobre todo, sobre el carácter fotográfico (o no) del trabajo de Samuel.
Al año siguiente la galería El Ojo Ajeno albergó la primera muestra individual de Samuel Chambi, titulada Principios de fotografía. En ella se incluía la serie ganadora del Salón del Icpna y varias otras series que abordaban una concepción de la fotografía alejada del propósito de la representación de la realidad: fotogramas, negativos subexpuestos escaneados al máximo para rescatar la poca información que contienen, etc. Todas ellas eran, tal como la fotografía más directa y realista, también imágenes fotográficas. El que nos costara reconocerlas como tales dependía, más bien, del hecho de que se alejaban de la retórica habitual de la fotografía, que es la de los medios de comunicación, la de la publicidad o la de la fotografía familiar.
Por ello, en el texto curatorial aquella muestra se decía que “el trabajo de Samuel Chambi es una llamada de atención sobre las posibilidades (quizá habría que decir las otras posibilidades) de la fotografía, una que nace de una comprensión íntima de los principios de la fotografía como medio de creación visual”.
Pues bien, en esta, su segunda individual, Samuel Chambi sigue retando las convenciones. Esta vez, se trata de un proyecto que viene desarrollando desde hace más de dos años que consiste en un conjunto de fotografías de espacios que podríamos denominar “populares” (en el sentido de que son utilizados, por lo general para el esparcimiento, por las clases populares de ciudades latinoamericanas) en los que los personajes han sido alterados: tras la fotografía, esta ha sido impresa y se ha pintado sobre cada personaje una vestimenta formal: un terno o un frac.
Con ese artilugio, Chambi recuerda los viejos procedimientos de retoque que utilizaban los estudios de retrato del siglo XIX y principios del siglo XX, procedimientos que eran parte esencial del estatus que generaba la imagen fotográfica para el retratado. En el trabajo de Chambi, sin embargo, este retoque manual cobra un nuevo sentido: Al ‘vestir’ con ropa formal a estos sujetos de espacios populares como playas, canchas de fútbol, piscinas públicas o parques, la vieja estrategia de ‘embellecimiento’ se transforma en un comentario social no exento de ironía: los personajes se ven ‘adecentados’ por el uso del retoque, con lo que sus prácticas sociales –en una región tan llena de desigualdades sociales como Latinoamérica– aparecen bajo una nueva luz: la de la denuncia irónica de las desigualdades a través de lo impostado de la vestimenta formal en espacios en los que sería vista como un –absurdo– símbolo de clase.
El curador de la muestra, Carlos Zevallos, se refiere a esta segunda individual de Samuel Chambi como una “posibilidad de volver a abrir un debate en el campo de la fotografía local, esta vez en torno a los discursos que sostienen la estética del registro fotográfico como documento de lo real en uno de los programas estéticos de la fotografía contemporánea: el documentalismo fotográfico”. Y añade: “Esta exposición es importante en un contexto como el nuestro: un escenario privilegiado para las retóricas de lo real por su multiculturalidad y ubicación en el (tercer)mundo. Además, significa la continuación de un trabajo personal enfocado en la reflexión y experimentación en torno a la práctica fotográfica en distintos niveles”.
Temporada: Galería El Ojo Ajeno, Centro de la Imagen, Av. 28 de Julio 815, Miraflores. Del 18 de abril al 19 de mayo. De lunes a viernes de 9 a.m. a 9 p.m., sábados de 9 a.m. a 7 p.m. Ingreso libre.
Visitas guiadas: sábado 29 de abril, 4 p.m. y jueves 18 de mayo, 7 p.m. Ingreso libre.
Conversatorio sobre la muestra: Participan Jaime Rázuri, Patricia Ciriani, Carlos Zevallos y Samuel Chambi. Viernes 5 de mayo, 7 p.m. Ingreso libre.
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